La disputa legal entre los exlíderes de Subnautica 2 y Krafton ha escalado tras nuevas acusaciones que señalan que el CEO de la compañía habría recurrido a ChatGPT para buscar formas de evitar un bono de 250 millones de dólares. Los fundadores de Unknown Worlds, despedidos en julio, afirman que su salida y el retraso del juego fueron movimientos deliberados para impedir que el título alcanzara las ventas necesarias para activar el pago.
Según un documento presentado ante el tribunal, el equipo legal sostiene que Krafton temía que pagar el “earn-out” dañara la imagen del CEO CH Kim dentro de la empresa. El informe asegura que, tras no lograr convencer a los fundadores de retrasar voluntariamente el lanzamiento, la compañía habría explorado opciones para “cancelar el earn-out”, incluyendo su despido. Incluso se afirma que la inteligencia artificial rechazó la idea, indicando que sería difícil evitar el pago bajo los términos actuales.

El informe también detalla supuestos mensajes internos de Slack en los que directivos de Krafton discutían negociar un bono menor o directamente ejecutar una toma de control del estudio. Días después, los fundadores fueron despedidos y Subnautica 2 fue retrasado oficialmente. Las acusaciones, sin embargo, han sido completamente rechazadas por Krafton, que insiste en que la falta de enfoque de los directivos en el desarrollo obligó a la empresa a intervenir.
Krafton sostiene que la decisión se tomó para garantizar la calidad del juego y afirma que incluso ofreció extender el periodo del bono si los ejecutivos regresaban a trabajar, algo que ellos supuestamente rechazaron. Mientras el proceso judicial avanza, la situación revela tensiones profundas en uno de los desarrollos más esperados del año, dejando el futuro de Subnautica 2 envuelto en controversia.
