El vicepresidente ejecutivo de Microsoft Gaming, Phil Spencer, ha dejado claro que no impondrá el uso de inteligencia artificial (IA) a los estudios de Xbox, Bethesda o Activision Blizzard. A diferencia de otras grandes compañías del sector, Spencer considera que cada equipo debe decidir libremente si desea aplicar estas herramientas en sus procesos creativos o no.
Durante su participación en el Paley International Council Summit, el ejecutivo explicó que el uso principal de la IA dentro de Xbox actualmente está centrado en la seguridad y protección de redes, especialmente en la moderación de chats de voz y texto, así como en la gestión de cuentas infantiles bajo control parental. “Quizá no sea el uso más glamuroso de la IA, pero es algo en lo que creo profundamente”, comentó.

En cuanto al desarrollo de videojuegos, Spencer afirmó que “los equipos usarán las herramientas que hagan su trabajo más fácil, cuando realmente lo hagan”, enfatizando que imponer directrices desde la dirección “no es un camino hacia el éxito”. De esta forma, Xbox se desmarca del enfoque de empresas como Krafton, que ya se ha declarado una compañía “AI-first”.
Spencer concluyó señalando que, por ahora, la aplicación de la IA en Xbox es más operativa que creativa, dejando claro que la prioridad sigue siendo mejorar la experiencia y seguridad de los jugadores antes que transformar la forma en la que se desarrollan los títulos.
