Sony ha actualizado el proceso de reembolsos en la PlayStation Store, permitiendo a los jugadores solicitar devoluciones directamente desde su historial de transacciones. Este cambio elimina la necesidad de acudir a un chatbot o representante de soporte, lo que representa un avance en la experiencia del usuario.
Sin embargo, la política de reembolsos de PlayStation no ha cambiado en lo esencial. Los usuarios solo disponen de 14 días para solicitar un reembolso, y queda totalmente prohibido si el juego ya fue descargado, incluso en casos de compras accidentales como confundir una versión de PS4 con la de PS5.
En contraste, la política de Steam es considerada la más amigable del mercado: también ofrece dos semanas de plazo, pero permite reembolsos incluso después de haber descargado el juego, siempre que no se superen dos horas de juego. Esta diferencia convierte a la plataforma de Valve en la referencia para los consumidores.
Aunque ha habido excepciones puntuales por parte de Sony, como con The Last of Us Part II o la retirada de Concord, la comparación con Steam evidencia que los jugadores esperan un sistema más justo y flexible en PlayStation, especialmente en la era digital donde los errores de compra son más comunes.
